miércoles, 4 de junio de 2008

Esa


Y volvieron a corroerme las tinieblas.
Entraron por la raya del ojo y la voz de mi madre colapsando mis sentidos por doquier.
Vuelvo a ser la prostituta de la sombra en las farolas.
Soy para el "Don Juan" la pegatina quitada en la botella.
"Te he dicho mil veces que no... ¡Que no! Maldito ángel"
La naturaleza me recuerda de qué estoy hecha.
Soy una mezcla de azufre, lágrimas y raíz de mandrágora.
Soy el espejo de una modelo.
La sangre de una princesa.
La voz de una sirena.
El arpa de cientos de musas.
Las cuerdas. Los hilos.
Soy esa canción que está en tu cabeza cuando vas a dormir y de la que olvidas constantemente el título.Porque realmente no soy. Sólo estoy.
Siempre.
A veces.
Cuando la noche se come a los pájaros y vomita murciélagos.
Y el agua me sabe a Whisky porque empino la botella con el mismo dolor.
Soy esa dama oscura que NO querrías tener al lado cuando envejezcas.
Con esa con la que coqueteas si el pecado te guía.
Si la lujuria te hace cosquillitas entre las piernas.
Si sientes que hoy será el ÚLTIMO día.
NO soy un mañana.
Soy un ayer.
Lástima que mis relojes (como los tuyos) siempre marquen "medianoche" pasadas...

1 comentario:

Irenita dijo...

Ya llegará el día en que nos hartemos de ver al reloj marcar mediodías, y entonces sólo seamos mañanas, y echemos tanto de menos haber sido ayeres alguna vez...

*Desde el trabajo :P