lunes, 14 de julio de 2008

Descubiertos

Dicen las malas lenguas que nos han visto.
Que han notado nuestro calor. Bífidas ¡Malditas!
Dicen que Ella ya lo sabe todo.
¿Acaso importa ya?
Nunca he notado la presencia de rivales en mi propio templo. Las musas son fieles, mucho más que tú y... seguramente... mucho más que "ellas". Las otras.
Necesito sentir el calor de la guerra de nuevo, sobretodo si hay algo por lo que luchar.
Necesito que caiga la sangre a borbotones, necesito olvidar mi aliento, expulsar mi alma, para sentirme viva.
He acuñado delicados versos con mis manos a la espera de afilar la espada.
Soy una Mujer con tiempo para todo.
Y se me traspapela la lírica con lo onírico y se me escapan versos mientras sacudo de polvo mi vieja armadura:


En un mundo de sueños sin dolor
yace la luna hambrienta de venganza
se afilan las espigas como lanzas
por no desterrar al rojo por color

Calienta el sol a fuego en la batalla
como si falta hiciera hervir la sangre
como si de victoria hubiese hambre
en las almas de los héroes que no callan

Y se clama a la suerte, al desvarío
se conquistan montañas, prados, rías
mientras se espera el paso de walkirias
para llevar al cielo a los caídos


Ya lo rezaban antes, como lo harán después "Si vis pacem para bellum"
El alma es atemporal.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué ganas de usar tus versos, no? ;)

SaLuDoS NaNaH!!!!!!

[[iSi]]

Miguelo dijo...

es el fragmentop de algun libro? no lo pillo